Entre la historia y el mito
En pocos artistas el tiempo tiene la importancia que alcanza en Wagner. No sólo es decisivo en el compositor o en el teórico de la interpretación, sino también en el dramaturgo, que aprovecha la música para desestabilizar el drama, provocando la continua presencia del pasado y la anticipación del futuro. Con la excepción de Meistersinger –y no del todo–, tanto en la ópera romántica como en el drama musical el tiempo está –como decía Hamlet–, “desencajado”. A veces, retrocede y el pasado retorna, como para Amfortas (primero, como tormento; más tarde, como cura). En...