Como los primeros doce
¿Cuál es el sentido de la vida? Esta es la cuestión fundamental del ser humano. Y la respuesta a esa pregunta marca el talante y la riqueza (o miseria) de la existencia. Además, puede dar pistas para encontrar el sendero que lleva hacia la felicidad propia y ajena. En este libro se estudian varios casos de personas que se plantearon ese interrogante, y el de otras que encontraron la respuesta casi sin buscarla. Todas coinciden en que, al descubrir la vocación de Jesucristo, experimentaron lo que el papa Francisco llama “el estupor de un encuentro”.