Don bosco: el hombre que amaba y era amado

Don Bosco amó con intensidad. Amó la creación: los paisajes, las plantas, los animales. Amó a los hombres: varones, mujeres, adultos, niños, jóvenes. En cuanto pedagogo y educador, el amor es el quicio de su teoría pedagógica y de su sistema educativo. Es suficiente recordar su conocida frase: “Basta que seáis jóvenes para que os ame mucho”. Y su no menos célebre precepto: “No basta que los muchachos sean amados; es necesario que se den cuenta de que son amados”. Este libro testifica positivamente la dimensión amorosa de Don Bosco. ¿Cuál es la fuente del amor de Don...