Parabellum

¡Richard ha vuelto! Llega la continuación de El acuerdo , un libro tierno y divertido que te enganchará de principio a fin. Richard puede añadir una línea más a su currículum: papá. ¿Cómo compagina la nueva responsabilidad con su vida acomodada? Lo que Richard y Katy comparten son años de inquietudes que se convierten en una familia poco convencional. Pero lo que él no sabe es exactamente cómo cambiará su vida y todo lo que será capaz de hacer por amor. La cláusula es una breve continuación de la historia de Richard y Katy que contiene toques de humor que muestran a Richard...

Ella se lo quiere chupar, y él la complace... más de lo que ella esperaba. Este relato erótico tiene contenido explícitamente sexual de sexo oral y relaciones sexuales entre hombre y mujer. Está destinado solamente a mayores de 18 años. Es una relato corto y excitante de 2.000 palabras. relatos eróticos, relatos eroticos, relatos eroticos en español, cuentos cortos eroticos, cuentos cortos gratis, cuentos cortos en español, cuentos cortos en español gratis, cuentos cortos, cuentos calientes, relatos calientes, historias xxx, relatos xxx

Su primer año fuera de casa estaba siendo casi perfecto, pero el fin de semana en el que se entregó a la pasión lo cambiaría todo. A sus dieciocho años, Harper había crecido bajo la disciplina de su padre, marine de profesión. Decidida a vivir la vida a su manera y a experimentar cosas de las que solo había oído hablar a los marines de la unidad de su padre, se marchó a estudiar a la Universidad de San Diego. Gracias a su nueva compañera de habitación, Harper conoció un mundo de fiestas, chicos guapos, familia y emociones. Pero se encontró en una encrucijada al enamorarse con...

Jamás habría creído que sería tan apasionante cumplir un castigo... El cowboy Vance Ryder estaba libre y sin compromiso, de hecho ni siquiera había ninguna ocupante en su corazón... hasta que le gastó aquella broma a la bella Miranda Jackson, una policía novata. Miranda no se lo pensó dos veces y le puso una multa por su estupidez, sin embargo la última palabra la tenía el jefe de policía, que les impuso a ambos un castigo que consistía en pasar una semana el uno en compañía del otro. Miranda se negaba a sentirse atraída por el juerguista de Vance... pero no pasaría mucho...