Tus pies también hablan

En un futuro que parece un espejo oscuro de nuestro presente, Martín acepta dejarse inseminar por su mujer. Hace tiempo que los hombres son capaces de gestar y parir igual que las mujeres. Pero no todo es armonía en este mundo igualitario. La sociedad está dividida entre partidarios de la continuidad de la raza humana y otros que prefieren la extinción. Los antiguos continentes se reordenaron o se desintegraron en una multitud de islas. Los problemas de Martín no hacen más que empezar. Comedia distópica, ciencia-ficción, novela de oficina, parábola feminista (¿o antifeminista?),...

Más de 150.000 ejemplares vendidos en Gran Bretaña Este no es un manual para el cuidado de los hijos. ¡Esto es la vida real! Sarah Turner se atreve a contar claramente las cosas que todos los padres tenemos miedo de compartir. Este libro no te enseñará cómo ser madre, qué comprar o cómo sentirte. Pero su refrescante sinceridad te garantizará algunas risas, tal vez te haga llorar y, sin duda, logrará hacerte suspirar de alivio al saber que, definitivamente, esas cosas no solo te pasan a ti... The Unmumsy Mum, de donde parte este libro, es la última sensación en blogs y Facebook en...

Accompanied by a crew, Hernán Cortés landed in 1519 on the coasts of Mexico. There is no turning back after he decides to burn the ships. From there, one of the most colossal adventures in history begins, and it is the march to Tenochtitlan, the center of the world, the heart of the impregnable Aztec empire.

¡Contratada como amante! Zoe Grace era terrible como ama de llaves de la hacienda Montero. Tanto que se enfrentaba a ser despedida tras solo dos semanas. Desesperada por mantener su empleo, estaba dispuesta a hacer cualquier cosa para convencer a su guapo jefe español de que le diera otra oportunidad. Alejandro Montero no podía creer que su nueva ama de llaves fuera tan inepta. Tenía que irse, y rápido. Pero despedir a la bella Zoe, que tenía a su cargo a dos niños, arruinaría su reputación. Así que Alejandro decidió instalarla al alcance de sus ojos, y tal vez de sus manos... ¡En ...