Wilhelm Dilthey nació el 19 de noviembre de 1833 en Biebrich, cerca de Wiesbaden, en el entonces Reino de Prusia. Fue un filósofo, psicólogo y sociólogo alemán conocido por su trabajo en hermenéutica y por haber establecido una clara distinción entre las ciencias naturales y las ciencias del espíritu, lo cual influyó profundamente en la filosofía y las ciencias sociales del siglo XX.
Hijo de un pastor protestante, Dilthey creció en un ambiente religioso y académico. Estudió en la Universidad de Berlín, donde se interesó en una amplia gama de disciplinas, incluyendo la filosofía, la historia y la teología. Su pensamiento fue influenciado por las ideas de pensadores como Hegel, Schopenhauer y Kant, así como por su formación en la tradición romántica alemana.
En 1857, Dilthey obtuvo su doctorado con una tesis sobre el filósofo alemán Johann Gottlieb Fichte. A lo largo de su carrera, ocupó diversos cargos académicos, incluyendo cátedras en las universidades de Kiel, Jena y Berlín. A medida que avanzaba su carrera, comenzó a desarrollar su teoría sobre las ciencias del espíritu, que se centraba en la comprensión cualitativa de la experiencia humana y en el significado de la vida.
Una de las contribuciones más significativas de Dilthey a la filosofía es su idea de que las ciencias del espíritu (Geisteswissenschaften) se diferencian fundamentalmente de las ciencias naturales (Naturwissenschaften). A través de su obra, Dilthey argumentaba que mientras que las ciencias naturales se dedican a la descripción y explicación de fenómenos físicos, las ciencias del espíritu se enfocan en comprender la experiencia humana y el significado detrás de las acciones y expresiones humanas. Para esto, promovió el uso de la hermenéutica, la interpretación de textos y contextos culturales, como herramienta principal para comprender la vida humana.
En su obra más conocida, «La estructura de las experiencias» (Erlebnis), Dilthey aborda el concepto de experiencia como el fundamento de la vida humana. Sostiene que la conciencia de uno mismo y la vida social están íntimamente ligadas. Su enfoque en la experiencia vivida como base de la comprensión del ser humano se convirtió en un pilar en los estudios posteriores de la fenomenología y la hermenéutica.
A lo largo de su vida, Dilthey publicó numerosas obras que abordan diversos aspectos de la filosofía, la psicología y la sociología. Algunos de sus trabajos más destacados incluyen «Introducción a las ciencias del espíritu» (1883), «La idea de la historia» (1910) y «El pensamiento filosófico en el siglo XIX» (1914), donde profundiza en el desarrollo del pensamiento filosófico moderno.
A pesar de su impacto en el campo de la filosofía, la obra de Dilthey ha sido a menudo considerada como difícil de clasificar. Su enfoque interdisciplinario, que abarca la filosofía, la psicología y la sociología, lo ha colocado a menudo en el centro de debates académicos, lo que ha llevado a algunos críticos a considerar que su obra es menos sistemática en comparación con la de otros filósofos contemporáneos.
En sus últimos años, Dilthey enfrentó varios desafíos personales, incluyendo problemas de salud. Murió el 1 de octubre de 1911 en Seis, Suiza, dejando un legado que continúa influyendo en muchas áreas del conocimiento. Su enfoque en la comprensión de la experiencia humana y su distinción entre ciencias naturales y ciencias del espíritu sentó las bases para el desarrollo de la filosofía moderna y sigue siendo un tema de estudio en filosofía, sociología y psicología.
En resumen, Wilhelm Dilthey es una figura clave en la historia de la filosofía y las ciencias sociales, cuyo trabajo continúa siendo relevante en los debates contemporáneos sobre la naturaleza de la comprensión humana y el significado de la experiencia en la vida. Su legado perdura a través de las generaciones, inspirando a pensadores y académicos en su búsqueda por comprender la complejidad de la existencia humana.