Rubén Darío, cuyo nombre completo es Félix Rubén García Sarmiento, nació el 18 de enero de 1867 en Metapa, una pequeña localidad en Nicaragua. Es considerado uno de los más grandes poetas en lengua española y una figura fundamental del modernismo literario. Su vida y obra marcaron un antes y un después en la poesía en español, introduciendo nuevas formas y temas que transformaron la lírica de su tiempo.
Desde joven, Darío mostró un interés notable por la literatura. A los 14 años publicó su primer poema en el diario local, lo que le valió el reconocimiento en su comunidad. Su formación como escritor fue autodidacta, alimentándose de clásicos de la literatura española y de obras europeas. A los 18 años, Darío se trasladó a León, donde se adentró en la vida literaria de su país y se empapó de las tendencias vanguardistas que comenzaban a fortalecerse en la región.
En 1888, Darío publicó su obra más influyente, Azul, donde reunió una serie de poemas y relatos que se caracterizan por su musicalidad, simbolismo y delicadeza. Este libro es reconocido como el punto de partida del modernismo en la poesía española, un movimiento que buscaba liberarse de las convenciones del romanticismo y explorar nuevas formas de expresión. En sus versos, Darío abordó temas como el amor, la muerte, la soledad y la búsqueda de la belleza.
La vida de Darío estuvo marcada por constantes viajes y cambios de residencia. Se trasladó a Buenos Aires, donde estableció relaciones con otros escritores e intelectuales, y más tarde, a París, donde entró en contacto con la bohemia artística europea. En Francia, escribió Prosas profanas (1896), una obra que refleja su fascinación por la cultura europea y su deseo de experimentar con la poesía. A través de sus versos, Darío introdujo un lenguaje más fresco y audaz, amalgamando el simbolismo francés con elementos de la tradición literaria hispanoamericana.
La figura de Rubén Darío también destaca por su activismo político. A lo largo de su vida, se comprometió con causas sociales y políticas, abogando por la libertad y la justicia en América Latina. En 1905, se convirtió en el cónsul de Nicaragua en Argentina, y a raíz de su labor diplomática, tuvo que lidiar con las tensiones políticas de su país natal. A pesar de sus éxitos profesionales, las crisis políticas y sociales de Nicaragua lo afectaron profundamente, lo que se refleja en su obra.
En su producción literaria, además de poesía, Darío incursionó en el ensayo y la crítica literaria. Publicó importantes obras como El canto errante y La canción del océano, en las que continúa explorando la complejidad de la naturaleza humana y el devenir de la vida. A lo largo de su carrera, su estilo evolucionó, y aunque mantuvo la esencia del modernismo, también incorporó elementos del modernismo social y la crítica social en sus escritos.
Darío se convirtió en una figura emblemática de la poesía en español y su influencia se puede sentir en escritores posteriores, tanto en América Latina como en el resto del mundo hispanohablante. Su legado perdura no solo en la poesía, sino también en la prosa, la crítica y el pensamiento latinoamericano. Rubén Darío falleció el 6 de febrero de 1916 en León, Nicaragua, dejando tras de sí un vasto legado literario que aún hoy se estudia y se celebra.
En resumen:
- Nombre Completo: Félix Rubén García Sarmiento
- Nacimiento: 18 de enero de 1867, Metapa, Nicaragua
- Obra destacada: Azul (1888)
- Movimiento: Modernismo
- Fallecimiento: 6 de febrero de 1916, León, Nicaragua
Rubén Darío sigue siendo un referente de la literatura hispanoamericana, y su contribución al modernismo es invaluable, influyendo en generaciones enteras de escritores que buscan la belleza y la profundidad en el lenguaje poético.