Malicia en el país de las fechorías

Un detective de la Guardia Civil llega a la lo-calidad navarra de Lecumberri en vísperas del Alzamiento Nacional del 36, siguiendo el rastro de un asesino que ha acabado con la vida del conserje del ayuntamiento, un car-lista acérrimo, enemigo del maestro del pue-blo, a su vez republicano. Todos los indicios apuntan al maestro como presunto asesino, pero el detective da con otra pista gracias al joven alguacil municipal, también panadero del pueblo, un personaje que piensa y actúa inspirado en el Quijote, único libro que ha leído repetidamente en su vida hasta apren-dérselo de memoria. ...

"¿Quieres saber lo que siento con las gafas de sentir? ¡Son todo un descubrimiento! Y yo soy un niño feliz"--Page 4 of cover.

“Esta obra es un trabajo concebido con el mejor espíritu y deseo de entregar o más bien colaborar con el estudio y análisis del arte ecuestre, para que todos quienes se interesan en el tema y son hábiles cultores de alguna de las disciplinas de la Equitación, puedan encontrar en estas páginas las recetas y las soluciones a la gran cantidad de dudas e inquietudes que se presentan cuando un disciplinado jinete galopa por el estudio y la práctica de la Equitación.”

Arturo no es un héroe, es un chico tímido al que le gusta comer chucherías. También le gusta Verónica, aunque de momento no se atreva a decírselo a ella. A Arturo siempre le ocurren cosas raras, como el día que tiene que atravesar la ciudad descalzo. Pero lo más extraño es cuando le hacen un hechizo para volverse «más fuerte que un adulto de los fuertes» y decide enfrentarse al matón del barrio.