Vida de Jesucristo I

La relación matrimonial se construye a base de rutina y es necesario saber encontrar en ella nuestra mejor aliada en vez de que se convierta en el enemigo más temido. El matrimonio y los días nos da las claves para hacer de lo cotidiano una aventura y conseguir dar la vuelta a los tópicos que amenazan el romanticismo: la suegra, los problemas de los hijos, el paso de los años... El matrimonio nace en un momento pero se hace durante toda la vida. Antonio Vázquez Galiano ha sido presidente durante más de 25 años de una Institución Educativa de ámbito nacional promovida por padres de...

Se ofrecen al lector tres narraciones de gran valor, nacidas en ambientes afectos a la Corte carolingia, entre los años 800 -coronación imperial de Carlomagno en Roma- y 843 -reparto del Imperio en Verdún entre sus nietos-, fin de la realidad territorial del Imperio. Tejen, a veces de manera apasionante, la vida política, militar, institucional, etc., del primer imperio cristiano de occidente, desde dos perspectivas políticas diferentes y a veces opuestas: las de las nacientes Alemania y Francia. El estilo narrativo propio de los anales es lacónico, pero su valor testimonial es...

El presente volumen expone el constitutivo de la antropología litúrgica como acción y como vida. Obra con especial significado para sacerdotes, casas de formación, seminarios y centros teológicos.

En el cristianismo, el tema más discutido es la salvación de los pecados y el Espíritu Santo. Sin embargo, muy poca gente tiene un conocimiento exacto de estos dos aspectos. Aún así la gente dice creer en Jesucristo, aunque no conozcan ni la verdadera redención ni el Espíritu Santo. ¿Conocen el verdadero Evangelio que nos hace recibir el Espíritu Santo? Si quieren pedirle a Dios que les envíe el Espíritu Santo, primero deben conocer el Evangelio del agua y el Espíritu y tener fe en él. Este libro guiará a los cristianos de todo el mundo para recibir el Espíritu Santo a través...

Si el universo tiene un sentido, una armon�a o una finalidad, entonces est� claro que los hombres -y con ellos los animales y las plantas, que ocupan s�lo un fragmento infinitesimal de este universo- no son necesariamente las �nicas criaturas que habitan en �l. Ser�a perfectamente l�gico que, junto a ellos, existieran otras criaturas, habitando mundos diversos y paralelos, que huir�an de la l�gica con que estamos obligados a conducir nuestra vida en la tierra. En esta dimensi�n se ubicar�an los �ngeles, figuras siempre presentes en las distintas creencias,...