Un buen tipo

El graduado más famoso de una escuela regresa a la reunión del vigésimo quinto aniversario de la generación, pero una mujer perturbada lo espera con un plan de veganza. Una historia corta que tiene la duración exacta para leerse durante la comida, 6200 palabras. Todo le ha salido bien a Brett Mann, hasta ahora. Un hombre afortunado es la historia del chico más popular de la escuela que regresa al sitio de sus glorias estudiantiles para la reunión de graduación. La vida lo ha premiado con una hermosa y elegante esposa, hijos brillantes, una carrera que es la envidia de cualquier hombre ...

Nito nace en Buenos Aires el día en que muere Juan Domingo Perón, julio del 74. Su infancia es una infancia como tantas, retorcida, inclemente, hecha de amores posibles e imposibles, aprendizajes y terrores, contra el fondo de la turbulenta historia argentina. Sus primeros años quedan marcados, además, por la muerte confusa de los suyos: su padre, su abuelo. Y Nito se siente cada vez más fascinado por ese tránsito, más acosado por las dudas: ¿cuál es nuestra relación con los muertos? ¿Se puede mantener el contacto con ellos? ¿Siguen entre nosotros? Años después, cuando se...

Una pasión más poderosa que el odio entre dos clanes.Atormentado por la muerte violenta de su familia a manos de su enemigo Gordon MacDougall, el nuevo laird Malcom Campbell, se propone vengarse no solo con la muerte del asesino, sino con hacer prisionera a su joven viuda.Pero en el momento en que Malcom pone los ojos en la altiva belleza pelirroja no puede dejar de pensar en ella, y decide cambiar sus planes forzándola a contraer matrimonio.Lady Sheena MacDougall lleva soportando los malos tratos de su esposo desde su precipitado casamiento, y ahora que por fin es libre, el laird de los...

Hola, Soy Estefanía y, como ya sabes, me he separado y ahora rezo para que llegue pronto el divorcio. Sí... sí, no me mires así, DI-VOR-CIO. Con todas sus letras. Por si lo has olvidado, te recuerdo que me separé porque descubrí que el caradura, por no decir un palabrotón, del que era mi maridito me la pegaba con otra mujer a quien tenía escondida en su teléfono como ¡Saneamientos López! ¡Se puede ser más ruin! En fin. Ya lo he asumido, aunque a veces no es fácil aceptar que Alfonso y yo ya no somos más que los padres de tres preciosos niños y unos auténticos desconocidos. A...