Saúl Yurkiévich nació el 24 de diciembre de 1931 en Buenos Aires, Argentina, y falleció el 22 de diciembre de 2018. Poeta, traductor y crítico literario, su obra se caracteriza por un estilo distintivo que fusiona la tradición con la modernidad. Desde joven, Yurkiévich mostró una inclinación hacia la literatura y el arte, atrayéndose a las corrientes poéticas que surgían en su tiempo.
Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, donde se sumergió en el estudio de la lengua y la literatura. Su pasión por el lenguaje lo llevó a explorar diferentes formas de expresión, y comenzó a publicar sus primeros poemas en revistas literarias locales. A lo largo de su carrera, Yurkiévich se destacó no solo por su producción poética, sino también por su labor como traductor, abriendo las puertas de la literatura contemporánea a los lectores hispanohablantes a través de la traducción de obras de poetas y escritores fundamentales.
Uno de los rasgos más notables de Yurkiévich fue su capacidad para mezclar elementos de la tradición literaria con innovaciones estilísticas. En sus poemas, es posible encontrar ecos de la poesía del Siglo de Oro español, así como influencias de poetas contemporáneos. Su enfoque hacia la poesía se caracterizó por una constante búsqueda de la musicalidad y la sonoridad de las palabras, elementos que se traducen en una experiencia sensorial enriquecedora para el lector.
En 1979, Yurkiévich publicó su primer libro de poemas titulado "El río de la vida", que fue bien recibido por la crítica y lo estableció como una voz única en el panorama literario argentino. Durante las décadas siguientes, continuó publicando una serie de obras que reflejaban sus inquietudes filosóficas y existenciales. Algunas de sus obras más destacadas incluyen "La ciudad de los césares" y "Poesía completa", que reúnen la esencia de su producción literaria a lo largo de los años.
A lo largo de su vida, Yurkiévich también se dedicó a la enseñanza, compartiendo su amor por la literatura y el arte con las nuevas generaciones. Su influencia se extendió a través de los talleres de poesía que impartió en diversas instituciones educativas, donde alentó a sus alumnos a explorar su propia voz y a desarrollar su estilo personal. Además, participó en numerosos encuentros y festivales literarios, donde tuvo la oportunidad de interactuar con otros escritores y poetas de renombre internacional.
Saúl Yurkiévich es recordado no solo por su contribución a la poesía argentina, sino también por su compromiso con la cultura y la educación. Su legado perdura en cada verso que escribió y en cada mente que inspiró. En un mundo literario en constante cambio, su obra se mantiene como un faro de creatividad y reflexión, invitando a los lectores a adentrarse en el vasto universo de la poesía.
Su vida y obra son un testimonio de la riqueza de la literatura argentina y de la importancia de la poesía como medio para explorar la condición humana. Saúl Yurkiévich, a través de su escritura, ha dejado una huella imborrable en el corazón de los amantes de la poesía y en la historia literaria de su país.